HASTA LA ULTIMA GOTA!

El agua es el liquido esencial para mantener la voz y el cuerpo saludable en un cantante. Es nuestro combustible, por lo tanto una obligación para todos aquellos que quieran mejorar su condición vocal. Sin agua, el sonido de tu voz carecerá de esa calidad que todos los cantantes buscan.

Las cuerdas vocales deben estar constantemente lubricadas para mantener su elasticidad. Solo el agua puede brindarnos esa lubricación. Los jugos naturales también hidratan y son una excelente fuente de vitaminas y minerales. Sin embargo, el cuerpo considera al jugo como una comida a ser digerida y tardan un tiempo considerable para llegar a lubricar la voz.

El agua es el único líquido que no es procesado como comida. Cuando tomas agua, al no ser digerida, pasa directamente al flujo sanguíneo y es distribuida a través de todo el cuerpo, focalizándose en los lugares mas necesarios. Luego de veinte minutos de ingerir el agua las cuerdas vocales son beneficiadas con su hidratación. Incluso después de haber lubricado las cuerdas, el agua puede evaporarse rápidamente si estás utilizando tu instrumento.

Si estás cantando mucho, la presión del aire entre las cuerdas puede secarlas de un momento a otro, especialmente si utilizas el falsete. Por lo tanto, la receta es una sola. Tomar mucha agua y más agua. A la mañana, en el almuerzo, a la noche antes de ir a dormir... A todo momento. Una persona que no exige sus cuerdas vocales debe ingerir entre 2 y 3 litros , por lo tanto un cantante debe tomar como mínimo 3 litros. Al principio nos demandará muchos viajes al baño pero, luego de un tiempo nuestro organismo se adaptará a las exigencias y a la ingestión correcta de agua.

Si consumen alcohol o cafeína, deben tener cuidado porque afectan directamente la voz. El alcohol es un deshidratante y la cafeína tiene un efecto diurético, por lo tanto van a secarte la garganta. No es necesario que se repriman esos gustos, siempre y cuando consuman suficiente agua para contrarrestar la deshidratación.

Las cuerda vocales están cubiertas con una delgada y pálida mucosa que las ayuda a mantener su elasticidad al lubricarlas continuamente mientras hablamos o cantamos. Cuando las cuerdas están deshidratadas, esta mucosa se vuelve amarilla y espesa limitándoles su habilidad para vibrar libremente.

Este el primero de los consejos que veremos sobre lo que se debe hacer y evitar para mantener una condición vocal y corporal saludable, porque no hay que olvidar que nuestras cuerdas no pueden independizarse de nuestra realidad corporal. Por eso si queremos tener energía de reserva para los momentos en que el cuerpo no nos responde como debería, debemos tomar, comer y vivir sano.